CINE - THE KILLER: A GIRL WHO DESERVES TO DIE (2022)

Hoy traemos al blog una película espectacular protagonizada por Jang Hyuk, con una trama sencilla pero un trabajo de acción que la coloca como una de las mejores películas del género del año. Un asesino retirado deberá volver a la acción cuando su mujer le pida que cuide de la hija de una amiga algo problemática que se verá metida de lleno en una conspiración, siendo secuestrada. Como digo, es una película con un guion muy sencillo, y es parte de su mérito. Tras el estreno de Carter (2022), todo un experimento visual de su director, nos encontramos con una película más clásica visualmente pero que demuestra que Corea sigue aportando grandes títulos al género gracias a unas coreografías de muy alta calidad que mezcla artes marciales con acción balística y unas dosis de violencia salvaje, espectacular, bien rodadas y que hacen que el cine coreano vuelva a ofrecernos una gran película que los amantes del género aplaudirán.

El director de El Guardián de Acero (2020) repetía con Jang Hyuk como protagonista en este actioner trepidante y apoyándose en el enorme carisma del actor para ofrecernos esta película sumamente dinámica y muy fresca. Jang Hyuk y la acción es lo esencial en esta película, demostrando el buen hacer del director y la química con el protagonista. Nada más empezar se deja más que claras las intenciones, ofrecer un espectáculo de alta calidad con una secuencia de acción que marcará el ritmo de toda la película. No obstante, tenemos, tras la mencionada secuencia inicial, un salto temporal al pasado para contarnos cómo se ha llegado hasta ese momento.

Aunque se toma su tiempo para poner sobre el tablero todas las fichas, el director, Choi Jae-hoon, mantiene la profesión del protagonista en secreto, aunque no hace falta decir nada, sus actos hablan por él. Nos muestra la vida tranquila y acomodada del personaje, su relación con su mujer y la poca gracia que le hace cuidar de una adolescente de las de hoy, es decir, con ganas de marcha y que pasa olímpicamente de los adultos, aunque se apoye en ellos cuando tiene problemas. Y por ello llamará a Bang Eui-kang, es decir, nuestro asesino retirado, cuando, tras engañarle diciendo que pasará esa primera noche de tutela, con una amiga, cuando en realidad ha quedado con un chico que será quien comience a provocar problemas.

Pero Bang es todo un profesional y se anda con cuidado, descubriendo que está en problemas y al que le da igual que sean otros adolescentes, chicos y chicas, los que provoquen esos mismos problemas. De esta forma se deja claro que Bang es un auténtico badass, totalmente creíble. Y a partir de aquí comenzará la acción. Puñetazos, patadas, pistolas, con ese estilo denominado gun-fu, sobre todo en su tramo final, hachas, cuchillos y todo lo que se te ocurra, será usado en unas secuencias de acción de quitarse el sombrero, con un ritmo trepidante que no necesita de los experimentos de Carter para ofrecernos una de las mejores películas de acción del año.

Tenemos violencia y sangre, pero sin llegar a la truculencia, y se va construyendo la trama de fondo, con el tráfico de mujeres que llega a altas esferas. Todo ello de forma muy suave, sin forzar nada y descubriendo todo lo que ocurre a la vez que el protagonista. Y esto le sienta muy bien a la película. La espiral de violencia irá in crescendo de forma simultánea a la gravedad de la situación, aumentando a la vez las armas usadas en cada secuencia. Si comienza dando puñetazos y patadas, poco a poco irá subiendo de tono cada secuencia de acción, y Choi Jae-hoon sabe dónde colocar la cámara, apoyándose en un montaje perfecto, del que deberían aprender los cineastas norteamericanos. 

Podemos ver cada técnica, cada golpe y cada momento de la acción, haciendo que disfrutemos de cada secuencia de una forma que no se suele ver en Hollywood, acostumbrados a los efectos digitales grandilocuentes. Por ello, The Killer: A Girl Who Deserves to Die se emparenta con el cine más clásico, pero con ese toque actual y sumamente dinámico que a tantos nos gusta. Tenemos en el reparto, además, a Bruce Khan, poco dado a aparecer delante de las cámaras tras su Revenger (2018), como un despiadado asesino rubio, la verdadera némesis del protagonista aunque no sea el mandamás, además de a Lee Seo-young (SomeAir) en su segundo trabajo en el cine como la adolescente problemática.

Es obvio que estamos ante una magnífica película de acción donde Jang Hyuk es la estrella absoluta, demostrando su buen hacer tanto en las secuencias de acción como actor, con un carisma impresionante, y que la película se ciñe a los cánones del género de una forma espectacular, pero sin descuidar una trama sencilla pero tremendamente efectiva, donde se hila todo perfectamente. The Killer da lo que promete y con gran calidad, volviendo a colocar al cine coreano en la primera fila del cine de acción. Una película que merecería un estreno en cines en nuestro país, o al menos en plataformas y que debería colocarse a la cabeza del cine de acción de este 2022.

NOTA: 8

IVÁN FERNÁNDEZ